Israel ha matado al menos a 112 palestinos en las últimas 24 horas, incluidos decenas de niños, niñas y personas de edad avanzada, quienes murieron en tres ataques diferentes contra escuelas que albergan a cientos de familias desplazadas. En la masacre más mortífera del día, 29 personas murieron, incluidos 18 menores; más de 100 resultaron heridas y, según se cree, decenas quedaron atrapadas bajo los escombros cuando cuatro misiles israelíes impactaron contra la escuela Dar al-Arqam de la ciudad de Gaza. En otro hecho, Israel bombardeó una planta de desalinización de agua situada al este de la ciudad de Gaza, en lo que constituye el último de una serie de ataques de las fuerzas armadas israelíes contra infraestructura civil del enclave palestino.
Mientras tanto, Israel ha ordenado la expulsión forzada de palestinos en más áreas del enclave. Actualmente, los residentes de barrios del sur de la ciudad de Gaza se están viendo obligados a abandonar sus hogares. Muchos de los afectados han sido desplazados en repetidas ocasiones durante los últimos 18 meses.
Taghreed Al-Fayoumi: “No hemos dormido en toda la noche. Fue una noche sangrienta. Hemos colocado techos sobre nosotros, pero se fueron volando. Hemos levantado muros, pero estos cayeron sobre nosotros. ¿Adónde vamos a ir? ¿A dónde debemos ir, gente? […] ¿Cuánto tiempo [más] seguiremos así? ¿Cuánto tiempo [más] seguiremos evacuando y regresando cada dos días, evacuando y luego regresando? ¿Hasta cuándo?”.
Naciones Unidas afirma que unos 280.000 palestinos han sido desplazados desde que Israel rompió unilateralmente en marzo el alto el fuego en Gaza. El Centro Palestino para los Derechos Humanos advierte que el bloqueo total de Gaza por parte de Israel, que ya lleva dos meses, ha generado una vez más condiciones de hambruna para unos dos millones de palestinos que dependen de la ayuda alimentaria para subsistir.
Democracy Now 4-abr-25
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